Gianni Vattino, padre del “pensiero debole”, concede una entrevista al Corriere della Sera (21 de septiembre) en la que aconseja a los homosexuales como él que “no se casen sino que hagan el amor”. El filósofo defiende la trasgresión de la vida gay y dice que subirse al carro del matrimonio sería matarla.
Pero lo más interesante de la entrevista, desde mi punto de vista, es cómo responde a la pregunta de que él mismo fue tentado por el matrimonio cuando era joven: “Sí, pero con una mujer. Sentía el reclamo del completamiento humano: me gustaba la idea de una familia de verdad, con suegras y sobrinos...” (el recorte recoge su respuesta: clicar para ampliarlo).
“Completezza umana", "una famiglia vera”... Después de tanta retórica vacía sobre la “familia homosexual”, pienso que era hora de volver al sentido común. Contrariamente a lo que digo en el título, en el fondo Vattimo no ha tenido un lapsus. Ha dicho en voz alta lo que piensan todos cuando dejan de lado la máscara ideológica.
Comentarios